Mami siempre pensó que sería lindo encontrarse con la familia que no veía hacia 11 años. Al final de la noche apareció el primo Naldo que hace poco cruzó de este lado. Naldo se ha pasado la vida sufriendo. Su padre nunca estuvo bien con el y tuvo que marcharse de casa cuando era un jovencito.
Cansado de la mala suerte decidió cruzar la frontera. Caminó tres días y tres noches tomando agua estancada en los charcos llena de barro y suciedades. No se piensa en el sabor del agua sino en la vida que puedes perderla.
Naldo se reventó los pies con las ortigas y los nopales del desierto. Las heridas infectadas no le detuvieron el paso. Llegó a Dallas y trabaja en lo que aparezca para enviar el dinero a su familia. Vive con una sonrisa en los labnios y toda la tristeza del mundo en los ojos.
Mami se sentó a su lado a çomer menudo mientras el me veia tirar la foto.
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